sábado, 5 de noviembre de 2011

Cinco de Noviembre de Dos Mil Once

El Valle del Silencio, me viene a la cabeza desde que Naia me descubrió el Gran Misterio. Se que es un lugar, un área sita allá, por el noroeste de España; perdida entre las montañas. Otro de esos parajes maravillosos de magnetismo mágico y acceso fatigoso; uno de tantos de los que en aquellas tierras me recibieron con regalos maravillosos. Fundido con la gran transpiración sudada se confundían los sentidos, y me sentía uno pequeño, y a la vez enorme... Allí, sobre todo, no me pesaba no tener nada que hacer. Allí, no me sentía culpable por, además, de hacer, no tener ganas, ni necesidad.

Deseo, como deseaba Naia, que se acabe el "bla, bla, bla"; y, como ella, hasta coseguirlo no voy a parar. Por suerte, no creo que yo vaya a necesitar berrear; por desgracia, no estoy seguro de tener la atención que tuvo su madre para saber interpretar su llanto sin zafiedad. Por algo el significado de Naia, en Euskera, ha de tener que ver con desear; no siento que sea casualidad.

Quiero, deseo ser y vivir como allí. Allí, perdido en la inmensidad de aquellos valles mudos,me permitía estar y nada más.

3 comentarios:

  1. Estar y nada más... Feliz Estancia en tí mismo, Dani.

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  2. Tu alma viajera nos descubre el sentimiento escondido.
    Gran narrador siempre, nos das lo mejor de ti mismo en tus historias.
    Ojalá se pudiera ser feliz sólo en el interior de uno mismo... Se puede?
    Besos.

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  3. Conectaste con "EL ESPIRITU UNIVERSAL"?,
    qué suerte tuviste de vivir esa experiencia.
    -No hay nada y allí está todo.
    -Eres muy pequeño y te sientes grande.
    -Hay un respeto enorme, te inunda.
    -La fusión te hace libre.
    -.........


    TODO ESTÁ BIEN!!!!!!

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Hacedor de Sueños by Daniel Calvo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial 3.0 España License.